La balanza tiene un significado simbólico más importante de lo que a primera vista pueda parecer, ya que define por completo a este signo tan especial, un signo que podemos considerar como equilibrado y sosegado, siempre y cuando los nativos nacidos bajo esta fecha, disfruten de cierta libertad.
Las personas nacidas bajo el signo de Libra acostumbran a ser diplomáticas y educadas, hallamos en ellos a los clásicos mediadores o embajadores, escuchan atentamente a las gentes y acaban poniendo paz.
Románticos y encantadores, las personas Libra transmiten sensaciones agradables a primera vista y sin esforzarse en hacer nada en especial, son reconocidos como amigos de toda la vida.
El romanticismo, la poesía y la creatividad en los temas sentimentales es otra gracia de los Libra. Son también muy idealistas consiguiendo proyectar lo que están pensando sin mucha dificultad.
Si tuviésemos que buscar una palabra clave para definir a Libra, podríamos usar la de armonía, aunque la deberíamos acompañar por la de «solidaridad» y en su lado más negativo por la de resentimiento.
Estas personas que buscan la armonía en todo lo creado, la suelen conseguir cuando encuentran a su media naranja, sin embargo, la balanza se puede desequilibrar por culpa de la falta de perseverancia del nativo del signo y también, por un excesivo interés en buscar el lado fácil de las cosas.
Físicamente hablando y a nivel general, los Libra, tanto hombres como mujeres, tienen una gracia especial que se caracteriza por su andar ligero, actitud elegante de la postura del cuerpo y gesto que se acompasa perfectamente con todo el conjunto.
Estas personas acostumbran a presentar un rostro dulce con facciones regulares y ojos hermosos. La frente siempre despejada se armoniza con una nariz pequeña y fina.
Las manos suelen ser largas. Las mujeres Libra siguen conservando su belleza pese al paso de los años, convirtiéndose en su madurez en lo que podríamos llamar mujeres interesantes.
Ellas lo saben, por lo que una manera de quedar muy bien con una nativa del signo será recordarle su belleza, aunque su timidez puede crear un sentimiento de rechazo si insistimos demasiado en ello, ya que una cosa es galantear y otra adular en exceso.
Por lo que se refiere a los hombres, sin duda son los más bellos y los que mejor presentan un prototipo fisonómico de individuo romántico, ya que su cuerpo es delgado, ágil y tendente a ser personas de gran altura.
Un último punto que no debemos olvidar nunca en una persona Libra es su ambición, que puede llegar a resultar muy peligrosa, por eso, aunque son grandes diplomáticos, grandes guardadores de secretos y personas discretas por naturaleza, será mejor no confiarles algo que les pueda afectar directamente, ya sea en su carrera amatoria o profesional, pues entonces los platos de la balanza tiemblan, se desajustan y Libra se olvida de quien es.
