Septiembre es un mes esencialmente feliz, pero con unos pocos baches en el camino para mantener interesantes las cosas, para mantenerte despabilado.
Sigues en una cima de placer personal anual y se gratifican los deseos de la carne. El 23 entras en una cima financiera anual. Es decir, hay prosperidad también.
Están bien la energía y la salud; tienes muchísima seguridad en ti mismo y más poder y magnetismo personales que de costumbre. Tienes la energía para conseguir cualquier objetivo que te propongas (los objetivos grandes llevan más tiempo, los pequeños se consiguen más rápido).
Aunque la profesión es importante y tienes éxito en ella, esta faceta se va sosegando. Este mes los planetas se trasladan de la mitad superior de tu carta a la mitad inferior. Llega, pues, el periodo para tomarte un respiro en la profesión (al menos externamente) y centrar la atención en el hogar, la familia y la vida emocional. Al caer la noche en tu año, trabajas en la profesión con métodos interiores, nocturnos, no externos, ni diurnos. Este es el periodo para preparar y formular las «condiciones interiores» para el éxito futuro. En este periodo haces acopio de fuerza para el siguiente empuje profesional.
Tu planeta de la espiritualidad entra en tu casa del dinero el 23 de Septiembre, y tu planeta del dinero entra en tu espiritual casa doce el 7 de Septiembre. A partir del 23 el sol y Venus están en «recepción mutua», cada uno es huésped en la casa del otro. Esto se considera un aspecto positivo: indica la colaboración mutua entre estos dos planetas; otra señal de prosperidad. La intuición financiera es maravillosa en este periodo y debes
fiarte de ella. Tienes mucha orientación interior, espiritual, en las finanzas. Podría llegarte directamente, en sueños y corazonadas o a través de otros: videntes, astrólogos, lectores de cartas, gurús o pastores religiosos. Es posible que la cosa más simple active la intuición financiera; esas cosas son mensajes interiores. Coges el diario y un párrafo te salta a la vista, te parece que tiene más significado; presta atención. Esto sólo es un ejemplo, pero cada persona recibe el mensaje a su manera, de la manera que puede entenderla.
Mercurio, el señor de tu horóscopo, también entra en tu casa del dinero este mes, el 17 de Septiembre; otra señal de prosperidad. El señor del horóscopo siempre es un amigo que ayuda; se considera afortunado.
Tu poder personal continúa muy fuerte; los planetas están en su posición oriental máxima (desde el mes pasado), así que no te adaptes, no te conformes. Créate condiciones o circunstancias según tus gustos, de las maneras que te agradan. Si cometes errores, los descubrirás por el camino y podrás corregirlos. Aprender a crear bien es como aprender cualquier otra cosa; se aprende de los propios errores.