Sobre Lilith, la Luna negra

La Luna negra es el punto astronómico más alejado de la órbita de la Luna. Se la reconoce desde hace muchos años por su mitología y simbolismo en la astrología antigua, como un símbolo maléfico y de gran misterio, pero ya en esta época se la considera como un elemento más complejo. No sólo se contempla su aspecto negativo, sino la información que nos aporta sobre los deseos más oscuros, aquellos no reconocidos, reprimidos o que generan gran dolor, conflicto, desafíos, crecimiento y rebeldía.

Qué simboliza Lilith en astrología

Está relacionada con nuestra Luna, con las emociones, el mundo de los sentimientos profundos, la rebeldía, está vinculada con la sexualidad no reprimida y con nuestra madre, pero simboliza aquella parte emocional que nos aleja de la madre, ese aspecto que se rebela contra ella y que se hace necesario por esta misma causa.
Lilith nos fuerza a reconocer qué deseamos, aunque eso que deseemos este mal visto, no sea correcto o resulte negativo. Como si señalara por qué nos pelearemos con la madre y nos iremos del hogar; qué nos movilizará a desafiar la autoridad y el deber. Lilith representa la parte de nosotros mismos que combate contra todos. Aquella parte que los hombres querrán dominar de lo femenino, si somos mujeres u hombres con emociones y cualidades femeninas, la que puja por poder, ganar y hacer lo que realmente desean, no lo que se les impone.

Lilith para los hebreos

Nacida antes que Adán, es el modelo de la primera mujer. Fue echada del paraíso por negarse a someterse a Dios y a Adán. Procuradora de amores ilegítimos, perturbadora de la paz matrimonia. Le dice Adán que es igual a él y que, por lo tanto, no se someterá a él. Lilith huye del paraíso o es hechada por Dios. En otras versiones, huye con Satán.

Lilith para sumerios y babilonios

Lilith habitaba el mundo inconsciente de los sueños, era una especie de demonio que visitaba a los hombres en sus sueños y daba origen a mostruos. No actuaba sola, tenía servidores que la ayudaban en ello. En otras versiones, Lilith adquiere un carácter satánico relacionado con el deseo sexual.

Lilith para los griegos

En el mundo griego antiguo, Lilith es equivalente a Pandora. Zeus quiso castigar a los hombres, ya que Prometeo les había regalado el fuego. Zeus se venga enviando a una bellísima mujer que guarda todos los tesoros de la vida en una caja que debía permanecer cerrada. Al abrirla, también salen los males que pueblan el mundo, libre hasta entonces de ellos.

Cómo encontrar tu lado oculto y hacerse amigo de Lilith

Todos los seres humanos tenemos una Lilith interna, una gran diosa oscura que nos habita. Verla como algo a lo que hemos de temer no es la forma de aprovechar sus grandes dones.
No hay que temer, sino comprender y comprender supone aceptar. Aceptemos que estos sentimientos y tendencias son, por momentos, parte de la vida emocional.
Lilith nos anuncia a nuestros demonios:
• Ella nos impone la necesidad de experimentar nuestros deseos.
• Es Lilith la que nos devuelve los sentimientos negados de la infancia.
• Ella nos muestra exactamente opuestos a lo que parecemos ser.
• Lilith gobierna el aspecto más oscuro y oculto de nuestra mente.
• Ella puede hacernos volvernos locos de placer.
• Ella puede matarnos si nos dedicamos a sentir todo lo que nos propone.
• Es Lilith quien nos hace desear aquello a lo que más miedo tenemos.
• Ella puede destruirnos, hacernos desaparecer psicológicamente.
• Lilith es una diosa mística, pero no buena. El éxtasis carece de moral.
• Lilith nos enseña que el placer sexual nos libera de tensiones.
• Ella representa nuestra sexualidad salvaje, animal, libre, instintiva.
• Suya es la noche, el secreto, lo prohibido, lo mágico, el misterio.